EL LLAMADOR DE LA CARIDAD DEL BARATILLO. ( SEVILLA).
En Plata repujados, así lucen los dos maestros de este "peculiar festejo taurino"; uno de ellos aún luce sobre su testa su montera, el otro ,a buen seguro, en alarde valentía ha brindao esta faena al respetable, ambos sostienen ese capote para dar un clásico pase al "alimón" , como emblema el escudo Baratillero, ese palio de Caridad que siempre ha sido paseado por los mejores, preciosa muestra de orfebrería andaluza.
Pero este llamador conlleva su peculiar "significado" o al menos así me lo parece a mí; esos angelitos que lidian con todo lo que se le presenten me recuerdan y mucho a la "gente de negro", los que capitanean nuestros pasos, ellos sí que "lidian" con adversidades, se aprietan los machos cada día, rezan sus oraciones antes de tocar ese llamador de "ángeles", ese llamador que subirá las plegarias de tantos corazones al mismo cielo. Esos hombres de negro, o mejor dicho de "azabache" como reza el argot de la tauromaquia, lidian en unos terrenos que poco son agradecidos, cada costalero es un mundo, cada uno es de su "encaste" y el buen torero tiene que saber como lidiar a cada uno, pues corrijanme si me equivoco, a todos no se les puede hacer la misma faena. Lidian con los "miuras" de las juntas de gobierno, auténticos "aficionados", en el peor de los sentidos, a este mundillo. Lidian con los demás hombres de negro, los cuales, poseídos por la envidia y la codicia ansían torear en esa plaza, ansían con manejar el estoque como tu.....
Ánimo MAESTROS, se acercan ya las fechas, el sorteo se ha realizado con el protocolo no escrito que hace tantos años dejaron para nosotros los mas sabios del lugar, el sol juega a colarse por el entramado del graderio, os ilumina la cara con resplandor de Dioses, tragan saliva pero su gaznate esta seco, sienten el sudor pasar por sus manos, pero ahora solo queda saltar al ruedo, esperar a la cuadrilla que se acerque a paso decidido, templarla y pararla de la euforia de los primeros compases de la faena, que se asienten, mientras tanto ustedes, MAESTROS, dibujen esa faena de ensueño en su corazón, no en la mente, el corazón es el que pega los pellizcos en el mismo sentio, todo esta consumado en sus manos la faena, bajen la mano izquierda y peguen la barbilla al pecho, trazen muletazos de ensueño con nosotros y como no, al enemigo, sea quien sea, pases de castigo con elegancia y un volapié y que las mulillas lo arrastren entre pitos y abucheos.....y mientras ustedes A TRIUNFAR.
VA POR USTEDES MIS MAESTROS......no pongo nombres porque ellos saben quien son.
P.D.: el que suscribe aconseja leer esta reflexión a los sones de un pasodoble, interpretado por Tejera a ser posible.
En Plata repujados, así lucen los dos maestros de este "peculiar festejo taurino"; uno de ellos aún luce sobre su testa su montera, el otro ,a buen seguro, en alarde valentía ha brindao esta faena al respetable, ambos sostienen ese capote para dar un clásico pase al "alimón" , como emblema el escudo Baratillero, ese palio de Caridad que siempre ha sido paseado por los mejores, preciosa muestra de orfebrería andaluza.
Pero este llamador conlleva su peculiar "significado" o al menos así me lo parece a mí; esos angelitos que lidian con todo lo que se le presenten me recuerdan y mucho a la "gente de negro", los que capitanean nuestros pasos, ellos sí que "lidian" con adversidades, se aprietan los machos cada día, rezan sus oraciones antes de tocar ese llamador de "ángeles", ese llamador que subirá las plegarias de tantos corazones al mismo cielo. Esos hombres de negro, o mejor dicho de "azabache" como reza el argot de la tauromaquia, lidian en unos terrenos que poco son agradecidos, cada costalero es un mundo, cada uno es de su "encaste" y el buen torero tiene que saber como lidiar a cada uno, pues corrijanme si me equivoco, a todos no se les puede hacer la misma faena. Lidian con los "miuras" de las juntas de gobierno, auténticos "aficionados", en el peor de los sentidos, a este mundillo. Lidian con los demás hombres de negro, los cuales, poseídos por la envidia y la codicia ansían torear en esa plaza, ansían con manejar el estoque como tu.....
Ánimo MAESTROS, se acercan ya las fechas, el sorteo se ha realizado con el protocolo no escrito que hace tantos años dejaron para nosotros los mas sabios del lugar, el sol juega a colarse por el entramado del graderio, os ilumina la cara con resplandor de Dioses, tragan saliva pero su gaznate esta seco, sienten el sudor pasar por sus manos, pero ahora solo queda saltar al ruedo, esperar a la cuadrilla que se acerque a paso decidido, templarla y pararla de la euforia de los primeros compases de la faena, que se asienten, mientras tanto ustedes, MAESTROS, dibujen esa faena de ensueño en su corazón, no en la mente, el corazón es el que pega los pellizcos en el mismo sentio, todo esta consumado en sus manos la faena, bajen la mano izquierda y peguen la barbilla al pecho, trazen muletazos de ensueño con nosotros y como no, al enemigo, sea quien sea, pases de castigo con elegancia y un volapié y que las mulillas lo arrastren entre pitos y abucheos.....y mientras ustedes A TRIUNFAR.
VA POR USTEDES MIS MAESTROS......no pongo nombres porque ellos saben quien son.
P.D.: el que suscribe aconseja leer esta reflexión a los sones de un pasodoble, interpretado por Tejera a ser posible.
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3 comentarios:
Aunque no hemos coincidido nunca en ningún paso, lógicamente no me encuentro entre TUS MAESTROS, pero eso no quita que me haya llegado tu escrito.
Que pellizco me ha dado, porque es la primera vez que alguien escribe sobre lo que de verdad siente un hombre de azabache, o al menos lo que sentimos los que nos desvelamos por nuestra gente, por aprender el oficio, por ser un poquito mejores cada día y sobre todo, por poner los pies en el suelo y saber que siempre queda camino por andar.
Hay matadores autocomplacientes a los que con que el toro doble ya les vale, y hay otros que por muy buena y honda que sea la faena, siempre le buscamos el "pero" que nos permita esforzarnos a ser mejores en la próxima, y eso, amigo mío, supone tener que ponerte delante de muchos morlacos, que desgraciadamente no todos tienen ni la nobleza ni el encaste necesarios. ¡Que le vamos a hacer!, para ir a plazas de primera, hay que hacer antes los pueblos.
Muchas gracias por tu artículo, me siento muy agradecido porque alguien vea al hombre de azabache como algo más que un presuntuoso al que solo le importa no rozar balcones.
PENACHO TE PIDO DISCULPAS POR NO HABER PODIDO RESPONDER ANTES Y DARTE LA BIENVENIDA A ESTE TU BLOG, ME LLENA DE ALEGRIA SABER QUE ESA REFLEXIÓN COMPARTIDA CON TODOS VOSOTROS TE HA LLEGADO, ES SIMPLEMENTE COMO VEO YO ESE COMPLICADO MUNDO DE NEGRO O "AZABACHE" QUE ES MAS BONITO, LA VERDD AÚN TENGO QUE APRENDER MUCHO DE TODOS VOSOTROS, PERO A DIA DE HOY SE QUE ES ALGO DURO Y QUE NO TODO ES ORO LO QUE RELUCE.
GRACIAS POR VISITARNOS Y TE DESEO LA MEJOR DE LAS VENTURAS EN ESTE AÑO QUE SE QUE SE TE PRESENTA CARGADO DE METAS A CUMPLIR, UN ABRAZO.
Efectivamente valenzuela, no es oro todo lo que reluce ¿será por eso que vamos de azabache? JEJEJEJEJE
Al final todo es una cuestión de actitud ante este oficio: el autocomplaciente que se queda con la fachada del asunto y está más pendiente de ver su nombre en la ficha técnica del "Ideal" que en saber como está su izquierda atrás, o el autocrítico, al que lo que más le preocupa es ver las sonrisas dibujadas en los rostros desencajados por el esfuerzo cuando vuelven a pisar marmol despues de la estación de penitencia.
A mí esto me está sirviendo de alguna manera como una escuela de la vida, en la que he aprendido que por encima de todo están las personas, y que del respeto a la individualidad nace la fuerza del grupo.
Sigue así, escribiendo esas cosas, que ante todo en esta Graná nos falta que se empiece a comprender todo lo que le pasa por el cuerpo a uno cuando se viste de azabache y coge un martillo.
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